sábado, 15 de junio de 2013

EDUCANDO AL HOMBRE DE HOY

 
                                 

Como un acto de amor
es la labor del docente
que al dar de sí lo mejor
demuestra ser eficiente.

Que educando con amor
no causa al niño perjuicio.
Y si comete un error
no lo juzga con prejuicio.

No lo trata de insensato,
de tarado o de insensible.
Porque es caso de maltrato
aunque parezca increíble.

No ignora limitaciones
ni lo humilla a cada rato
haciendo comparaciones.
Porque es caso de maltrato.

Siempre valora el esfuerzo
que hace en su aprendizaje,
y hasta le hace refuerzo
sin maltratos ni ultraje.

No mata el potencial
de quien hasta puede ser
un niño genio o especial
que mucho puede aprender.

No hay comentarios:

Publicar un comentario