Época de reflexión
sin duda es la navidad.
Es una celebración
desde mucha antigüedad.
Con la mejor intención
la celebra mucha gente,
como una tradición
del creyente y no creyente.
Pues se habla de Jesús
pero muchos no le creen,
aunque en el mundo da luz
a los que hacen el bien.
Y el bien que se puede hacer
por amor a toda gente
es enseñarle a leer
y escribir correctamente.
Es enseñarle a leer
la Biblia correctamente
y que la pueda entender
sin confusión, claramente.
Es liberar al cautivo
en Babilonia la Grande.
Pescando al hombre vivo
para que a oscuras no ande.
Así la mejor navidad
es que a nadie se haga daño,
y al conocer la verdad
se libere del engaño.
Por tanto el mejor regalo
que cualquiera puede hacer
es librar de lo que es malo
a quien aprende a leer.
(Mr.1:17; Jn.8:12,32; Rev.18:1-18)
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